Título: Útil al Señor
Texto: 2 Timoteo 2:21
*Después que hemos propuesto en nuestro corazón no contaminarnos, ser puros, ser cristianos más comprometidos, ser instrumentos y servir más al Señor; el Señor nos dice cómo hacerlo. Muchas veces estamos frustrados o desanimados porque creemos que no hay esperanza para nuestras faltas, pecados o errores.
*Sí hay esperanza: Jesús limpia completamente (Heb 10:1-2, 10-14) Los sacerdotes aprendieron a lavarse, a hacer ceremonias para ministrar, pero era insuficiente espiritualmente. En Jesús la limpieza es perfecta.
¿Cómo Limpiarte?
1. No minimices el pecado. Reconoce La vieja levadura (1 Cor 5:7). Lo más fácil es albergar cosas en el corazón, chismes, amargura, murmuración. El que murmura no escucha la voz de Dios (Salmo 106:25).
2. Cuídate del mal uso. El mal uso de un instrumento puede resumirse en 1) El no usar un instrumento para el fin para lo que fue creado, es vano (2 Tim 2:16) 2) el Usar el instrumento para otro fin diferente al que fue creado.
3. Ríndete al plan de Dios. Deja que él moldeé tu vida, deja que Él prepare tu vida como Él quiere. Aquí la advertencia es no cuestionar a Dios por lo que hace en tu vida y en la de los demás (Rom 9:21)
4. Sirve al Señor. (Juan 15:2) (Juan 17:18-19) Sigue produciendo fruto. El que tiene fruto Jesús lo limpia. El buen instrumento debe ser limpio, lo que limpia es la Palabra de Dios, el que sirve debe estar limpiado por la Palabra de Dios. El que sirve lo hará bien, será pulido, será edificado, será preparado por la Palabra de Dios.
5. Con la Palabra de Dios. Lo que poda las ramas malas de la planta es la Palabra de Dios. Cuando un creyente se expone a la verdad, el servicio será mejor, la capacidad será mejor (Juan 17:17). Escucha la Palabra de Dios (Juan 15:3) La Palabra que Jesús habla es que limpia, entonces, ha dejado de hablar el Señor! (Juan 10:27). Esto te lleva a escuchar más la predicación, leer más la Biblia, aprender más, capacitarte en conocimiento más profundo. Uno de los propósitos porque preparamos los mensajes es para que estés preparado para TODO (2 Tim 3:17).
*El que escogió ser instrumento de honra, servirá al Señor. Pero otros serán instrumentos viles o de deshonra.
¿Cuál es el resultado de esta limpieza?
- Instrumento para Honra. Honra es valor. El valor justo. Cuando nuestras vidas estás sirviendo a Cristo es porque hemos entendido que Él es nuestro amo (Señor), que nuestra vida le pertenece y que nuestro propósito es que Él la use como quiera, para su gloria, para agradarle. Este cristiano está preparado en la línea de la carrera correcta, está enfocado, sabe lo que quiere, tiene una convicción clara de que su vida es para glorificar a Cristo. Le está dando el valor correcto a las cosas correctas (1 Cor 1:27) Aquí vemos que Dios no escogió lo necio para que se quede necio, ni lo débil para que se quede así, sino para ser transformado por el poder de Dios. Pablo entendió el valor de la vida (Filip 3:8).
- Instrumento Santificado. Espíritu, alma y cuerpo (1 Tes 5:23). Irreprensible significa sin mancha, sin falta, difícil de agarra. Si fuera por cualquier falta humana, nadie fuera irreprensible, pero nos enseña que es una lucha y constancia por un buen testimonio de la pureza del Señor (1 Tes 2:10).
- Instrumento Útil. Una palabra muy usada para el uso de los esclavos. El diccionario Bíblio Vine nos recuerda que Onésimo fue un esclavo que huyó de Filemón y ahora, cuando se convirtió a Cristo era útil a Pablo (Filemón 1:11). La pereza, la apatía, el me “hice el loco”, no pueden seguir en nuestras vidas (Rom 12:11).
- Instrumento Dispuesto para toda buena obra. ¿Ha visto usted las herramientas multiuso? 3 en 1, 5 en 1, 10 en 1. Compras un solo artículo y te funciona para varias cosas. Como Dios es quien capacita, Él quiere usarte para su gloria en cosas que no te imaginas, de maneras que no sabes, con capacidades que Él te da. Una verdad es que no podemos hacer todo lo que queramos, pero Dios puede hacer todo lo que Él quiere con nosotros. Ocúpate, el que NO se ocupa en el Señor, el diablo lo va a usar (Fil 2:12-15). En la iglesia local debemos servir a los niños, jóvenes, adultos, enfrentar los pecados de este tiempo, entrenar a otros, servir en los ministerios y otros que se crearán, Son fruto de la fidelidad en lo poco para servir en lo mucho.